SANTO DOMINGO. Los aportes de una medalla de oro, tres de
plata y un bronce que brindó al país Dulce María Piña en cuatro Juegos Centroamericanos y del Caribe,
recibirán la merecida recompensa el tercer domingo de octubre próximo cuando la
atleta sea exaltada al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano.
La judoka nativa de San Juan de la Maguana abrazará la
inmortalidad en el XLVI Ceremonial de la
Fama que tendrá lugar en el nuevo Anfiteatro del Pabellon de la Fama situado en
la parte oeste del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, el domingo 21 de octubre, informó el
Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, a través de su presidente, el doctor Luis
Scheker Ortiz.
Dulce
Piña fue seleccionada por el Comité
Permanente, integrado además por Carlos Lamarche Rey, Atilio de Frías, Rolando
Miranda, Gonzalo Mejía, Thimo Pimentel, Rubén Luis Andújar, Luis Ramón Cordero,
Rafael Damirón, Jose A. Rodríguez Conde y Dionisio Guzmán.
Piña representó al país desde 1990 hasta el 2003 cuando, a
raíz de la celebración los Juegos
Panamericanos Santo Domingo ‘2003, hizo el esfuerzo final por darle una medalla
más a la República Dominicana, y obtuvo bronce.
En esos 13 años, ni antes y ni después, el judo dominicano
había tenido una atleta de la trayectoria de Dulce María. Por eso recibirá el
espaldarazo de la gloria y el laurel de la inmortalidad el citado domingo 21 de
octubre.
Al momento de su retiro y hasta la fecha es considerada la
mejor judoka femenina en la historia de este deporte. Piña debutó en los Juegos
Centroamericanos y del Caribe de México ’90. Ese año, siendo apenas una
adolescente, Dulce María le brindó al país una medalla de plata en la división
de los 66 kilogramos.
Hizo otras grandes hazañas para una atleta de su rama,
incluyendo la de ser la primera y única mujer que ha participado en cuatro
versiones de los Centroamericanos y del Caribe.
Además
de México ’90, Dulce María compitió y ganó plata en
las versiones de Ponce ’93 (Puerto Rico), Maracaibo ‘98 (Venezuela),
logrando oro en El Salvador ‘2002 y bronce en la división abierta,
donde también
fue la primera medallista del país, siendo esta su mejor actuación en
estos
juegos.
Piña además obtuvo sus dos primeras medallas de bronce en Juegos Panamericanos,
versión Mar del Plata ’95 (Argentina) y
fue la única atleta de su disciplina que
subió al podio en esa cita continental, de siete preseas que logró la República Dominicana.
Dulce María fue la
primera judoka de su género que clasificó y participó en unos Juegos Olímpicos,
acreditándose la primera posición en los 66 kilogramos logrando dicha hazaña en
la versión de Atlanta ’96.
También conquistó bronce en Santo Domingo 2003, el año que
marcó su retiro de la selección nacional y de toda competencia internacional a
nivel oficial. Piña es la cuarta seleccionada para ingresar al Pabellón de
siete que lo harán este año. Ya fueron anunciados los propulsores Ricardo Gioriber
Arias, Hanns Hieronimus y Felicia Candelario, ex selección nacional de atletismo.
Además de sus logros en Juegos Centroamericanos y
Panamericanos, la hoy presidenta de la Federación Dominicana de Judo ha
acumulado más de 20 medallas, en eventos
internacionales, regionales y
continentales, así como Campeonatos Abiertos de Estados Unidos y España.
Al saber la noticia de su elección, Dulce María expreso “Ser
escogida para la inmortalidad es una grata noticia y una enorme sorpresa para
mí. Llega en el momento cuando me convierto en la primera mujer que dirige la
Federación de Judo, y ahora también seré la primera de mi género en ser
inmortal.”
La sanjuanera es la cuarta de ese deporte que llega al templo
de la Fama del deporte nacional, uniéndose al ex atleta Radhamés Lora, en 1992;
así como a los propulsores Juan Chalas y
Mamoru Matsunaga, en los años 2003 y
2009, respectivamente.
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